EN EL MUNDO DE LAS LETRAS, LA PALABRA, LAS IDEAS Y LOS IDEALES
REVISTA LATINOAMERICANA DE ENSAYO FUNDADA EN SANTIAGO DE CHILE EN 1997 | AÑO XXVIII
PORTADA | PUBLICAR EN ESTE SITIO | AUTOR@S | ARCHIVO GENERAL | CONTACTO | ACERCA DE | ESTADISTICAS | HACER UN APORTE

— VER EXTRACTOS DE TODOS LOS ARTICULOS PUBLICADOS A LA FECHA —Artículo destacado


Homero y todos los hombres.

por Fernanda Montoya
Artículo publicado el 19/08/2012

Yo he sido Homero; en breve seré Nadie, como Ulises;
en breve seré todos: estaré muerto.
Jorge Luis Borges, El aleph, 1949

 

Italo Calvino sugería que existía un relato que contenía un preludio implícito a la Odisea, según Alberto Manguel, la Ilíada podría constituir también una narración primigenia semejante: “el relato tácito de toda guerra, no sólo de la guerra de Troya”. Baricco un poco más adelante entendería la Ilíada como un verdadero “monumento a la guerra”. Al exaltar la belleza de la guerra, Homero estaría exaltando nuestras más profundas pasiones, erigiendo para siempre el monumento de la humanidad. Según Heráclito, la guerra era precisamente esa energía combativa que mantenía al mundo unido; pues Homero, con su Ilíada escribió una batalla que duraría toda la eternidad y que constituye el origen mismo de la especie: la discordia. Aunque sea el relato más violento de todos los tiempos, nos parece la más bella creación escrita en la tierra. Y es que aquello que nos es familiar no puede parecernos sino bello. Fueron los ojos ciegos de Homero los que pudieron de igual forma vislumbrar esa belleza intrínseca al ser, deseoso de discordia y violencia. Homero no puede evitar exaltar el deleite que provoca la caza cuando Ulises y Telémaco atacan a los traidores, comparándolos con buitres que se abalanzan sobre sus aves de presa:

… a buscar suben éstas refugio en las nubes, mas ellos
las persiguen allá, las asaltan y matan, perdidos
todo escape y defensa, y deleita a las gentes de la caza.
(Odisea, XXII, 304-306).

La cólera de Aquiles y la nostalgia de Ulises no han dejado jamás, a lo largo de la historia, de desenmascarar a toda la humanidad. El hecho de que estos dos relatos fueran traducidos por siglos y siglos es una cuestión extra literaria que apunta al elemento vital de estos mismos relatos, con esta idea coincidirían los clichés “toda vida es una batalla y un viaje”. Homero fue un hombre mortal o un bardo ciego y murió como todos. Homero fue un colérico nostálgico, como todos, pero fue el primero. De ahí que nuestra sociedad se acurruque a los pies del fantasmagórico escritor, como reclamando en una batalla nostálgica, las sombras de nuestro pasado y las luces del futuro.

Print Friendly, PDF & Email


Tweet



Comentar

Requerido.

Requerido.




 


Critica.cl / subir ▴