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Análisis de la práctica docente considerando el Aprendizaje Centrado en el Estudiante de nivel Licenciatura.

por Jesús Arámburo Lizárraga
Artículo publicado el 26/09/2018

Resumen
Este ensayo permite reflexionar sobre la práctica docente que he realizado en los últimos años, específicamente en materias relacionadas con programación, mostrando un análisis sobre la forma de desenvolverme en clase, esperando que el estudiante tenga la motivación de mejorar como profesionista al finalizar su licenciatura, donde mi colaboración como profesor en el proceso enseñanza-aprendizaje consiste en guiarlo para conseguir conocimiento nuevo, que le permita ser un profesional exitoso y por consecuencia me permita ser un profesor exitoso.

Palabras claves
reflexión educativa, proceso enseñanza-aprendizaje, motivación, profesor entusiasta, estrategias didácticas

 

Introducción
En mi práctica docente dentro del área de Tecnologías de Información imparto materias relacionadas con el área de Programación, por lo tanto, son actividades enfocadas a un taller donde es necesario que el alumno necesite de una computadora. Al preparar la clase utilizo un diseño acorde a los temas incorporados en el plan de estudios de la materia, analizo los tópicos y veo qué ejemplos son los más idóneos para comprender dichos temas y el alumno complemente su aprendizaje, explico la unidad relacionada, tanto de manera teórica como práctica y los alumnos desarrollan conmigo ejercicios para ser resueltos en clase, pregunto por dudas y analizo si existen temas más complejos, aquí hago una pequeña pausa porque me doy cuenta al momento de abordar un tema difícil si no se queda comprendido el estudiante se pierde, es decir, el estudiante se desmotiva cuando no comprende cómo resolver un problema, su lógica lo empieza a frustrar, por lo que se genera un cierto grado de apatía, y me planteo ¿cuál es la mejor forma de enseñar dicho tema?, ¿cómo perfecciono mi labor docente?, ¿qué otras técnicas aplico para que se entienda el tema?, considero aprendizaje basado en problemas, lo mezclo con aprendizaje colaborativo, o por competencias, empiezo a indagar sobre mi forma de aprender y me doy cuenta que soy kinestésico y la forma de preparar mi clase es la proyección de mi forma de aprender, es decir, quiero transmitir los conocimientos de esa manera, por lo tanto, es importante diversificar la forma de impartir la clase.

Cuando estoy en clase me dirijo a los estudiantes de una manera apropiada y de respeto, autocriticándome, reconozco que me falta ser más bromista, no ser tradicionalmente como expositor, o mejor dicho estar parado frente a un público donde soy un ejecutor de la enseñanza, sino más accesible y sobre todo me doy cuenta que cuando son muchos alumnos (aproximadamente más de 15) y la clase es tipo taller es complicado manejar las dudas de todos los alumnos, pero cuando son pocos entre 5 y 10 alumnos, la clase resulta más personalizada y accesible.

Le energía que manejo en clase es amable, con buen ánimo, evito llevar los problemas personales a mi clase, dejando a un lado complicaciones monetarias, situaciones familiares no favorables, relaciones de pareja, para cumplir con mi rol y complementar mi trabajo docente. Lo más difícil es resolver las dudas de manera eficiente, tener tacto al momento de dar la solución para no crear un ambiente donde el estudiante piense si su pregunta es tonta o demasiado fácil, por consiguiente preparo ejemplos prácticos y comprendo los temas para transmitirlos, realizar un autoanálisis hasta qué punto soy bueno, el tiempo a permanecer en un mismo tema para la comprensión del mismo, las necesidades de mis estudiantes por entender todos los temas cuando deben ser vistos en su totalidad acorde al plan de la materia y cubrirlos en el ciclo escolar, a pesar de que algunos estudiantes se hayan atrasado.

El papel del alumno visto desde mi práctica docente
El alumno necesita aprender, obtener conocimientos y para lograr eso, se debe motivar bajo la premisa de ser un profesional exitoso, sin embargo, ¿qué pasa cuando existen alumnos donde la licenciatura que estudian no ha sido su principal opción?, ¿cómo se ve mermado su desempeño académico?, es decir, están obligados a estudiar alguna licenciatura para continuar su vida y tener un título profesional.

Me surge una gran pregunta, ¿en qué punto llega el alumno a mi clase?: 1) es un alumno apasionado por la carrera que estudia actualmente, 2) un alumno sin trabajo, 3) un alumno sin problemas familiares y económicos, 4) un alumno obsesionado con su celular y sus redes sociales, entre otros factores, es decir, donde están sus pensamientos, con qué nivel de conocimiento base arriba de otras materias previas, pero son claves para mi materia, por lo tanto, considero que el alumno necesita motivación constante por aprender y actualizarse.

Empezaré narrando la descripción de un alumno eficiente, el mejor caso, aquél con la dedicación, empeño y amor por su carrera, un destino laboral prometedor, un alumno con notas destacadas (arriba de 90) significa un alumno dedicado, inteligente, comprometido a seguir algo, su pasión, su perfección por ser el mejor en clase, un alumno atento en el aula participando, desarrollando tareas, demostrando sin ser criticado, simplemente reconoce la necesidad de adquirir conocimiento mediante el estudio de los temas y el desarrollo de ejemplos prácticos, es un alumno participativo, activo de la clase, deseando conocer temas nuevos y retadores, un alumno autodidacta, autónomo para aprender con o sin la ayuda del profesor, este alumno autónomo es el prototipo del mejor caso de estudiante.

Ahora, consideraré otro caso, digamos el peor, aquél estudiante que no realiza tareas, distraído en clase y no estudia para los exámenes, mencionando su poca o nula participación en las actividades de la clase, se sienta en su silla para que el tiempo de la clase se termine, el estudiante totalmente apático, pero lo más importante es qué sucede y cómo es ese estudiante de mi clase, ¿qué problemas familiares, personales o económicos le suceden?, su familia o sus amigos le han dicho qué debe estudiar, ¿superación o imposición?, ¿consume sustancias tóxicas?, ¿problemas con el alcohol?, ¿rechazado por sus preferencias sexuales?, es decir, ¿qué factores externos propician para que ese joven se convierta en un mal estudiante?, sin olvidar el famoso celular presente todo el tiempo, por lo tanto, se encuentra pensando en otros temas diferentes a la clase misma, preocupados por cómo mejorar en sus redes sociales, seleccionar fotos de su inmensa galería para elegir una pose adecuada, la elección de un lugar para visitar, actualización de sus perfiles, envío de memes cómicos, es decir, encontrar la manera de divertirse en un medio digital porque en su vida real tiene tantos problemas que será mejor evadirlos con esa representación digital, a final de cuentas en su celular tiene un universo lleno de contenido multimedia para olvidarse de su realidad.

Entre el límite de ambos casos, el mejor y el peor estudiante, llegan la mayoría de mis alumnos, por lo tanto existe una diversificación donde cada uno de ellos es un caso individual que requiere atención, un análisis previo donde llevan un patrón desde su inicio universitario, puesto que mis materias impartidas son para estudiantes que llevan dos años o más en la universidad es un proceso complejo crear un análisis psicológico de todos aquellos motivos o estados de ánimos con los que el alumno cuenta al llegar a clase, por lo que es necesario contar con esas habilidades, para lograr enganchar al alumno a la clase y a pesar de no ser psicólogo y no contar con una especialidad para poder darles solución a ese tipo de problemas personales, si poder ayudarlos desde el punto de vista académico y por lo tanto generar conocimiento donde el alumno finalmente aprende.

Estrategias para mejorar mi práctica docente
Existe una estrategia primordial, la motivación por enseñar, si estoy motivado puedo ayudar a mi alumno a motivarse y por conclusión su desempeño académico mejorará, y a su vez mi práctica docente se perfeccionará.

Mi motivación será utilizar las diferentes metodologías de aprendizaje para darle una variedad a mi práctica docente, utilizar los casos aplicados en su carrera, dar a conocer las empresas más importantes donde pueden desempeñarse, qué y cuáles son los conocimientos solicitados por la industria, organizar pláticas con profesionales que colaboran en las empresas, donde la interacción con la universidad es primordial.

Aquellos alumnos que ocupan una silla fingiendo estar en clase, pero su mente está en otro lado, siempre serán los estudiantes más difíciles, más no imposibles de motivarlos, se deben buscar estrategias de enseñanza para reflexionar sobre sus intereses y aspiraciones tanto profesionales como personales, ponerlos a trabajar colaborativamente en el grupo con otros compañeros, es decir, moverlos de lugar con estudiantes sobresalientes.

Aquellos alumnos que no tienen el mismo nivel académico que otros, algunos captan más lento los temas y por lo tanto aprenden en un tiempo mayor, buscar la forma de nivelarlos con tareas adicionales, proyectos personales de programación para revisar en clase, exposiciones en conjunto con los alumnos sobresalientes, por lo que un diagnóstico previo realizado a los estudiantes en la primera semana de inicio de curso permite identificar aquellos alumnos sin conocimientos previos o débiles.

Enseñar software utilizado por la industria, mostrar la importancia de conocer software actualizado, es decir, lo que aprenden en clase será utilizado en algún momento en su vida laboral.

Incorporar redes sociales para manejar otra dinámica con ellos sobre evaluaciones de tareas y cursos, lo importante a destacar es poner los límites de la utilización del celular en clase, porque luego uno como profesor parece artista de espectáculos posando para la cámara del estudiante, siempre tener cuidado en su utilización y pedir permiso para habilitarlo en la clase.

La resolución de problemas prácticos para que ellos resuelvan y apliquen, utilizaré casos específicos cuando un tema lo requiera y un proyecto global de desarrollo de un programa, terminado en tiempo y forma a lo largo del curso, considerando una rúbrica de calidad. Es posible utilizar la combinación de las diferentes metodologías de aprendizaje con los diferentes tipos de aprendizaje haciendo la clase dinámica y ágil.

El alumno es un ser autónomo, capaz de estudiar, de aprender, de motivarse, de adquirir conocimiento académico, por aplicar lo aprendido, por lo tanto, motivarlo es fundamental para que se genere un aprendizaje consistente.

Por lo que mi estrategia, es mi motivación, mi ser como persona, como docente no juzgando a los estudiantes, sino para ayudarnos mutuamente y juntos desarrollemos conocimiento en la interacción profesor-estudiante.

Conclusión
El análisis de mi práctica docente me ha llevado a cuestionarme cómo puedo mejorar mi habilidad docente, sobre todo dejar de ser un ejecutor en este proceso de enseñanza-aprendizaje y ser un colaborador, la motivación de mi persona es clave para comprender y transmitir el conocimiento a mis estudiantes, un profesor comprometido y de igual forma que el estudiante, al momento de entrar a la clase, dejar todos aquellos problemas personales o externos para no desconcentrarme, mi aula es mi mundo y la interacción con mis estudiantes necesita ser dinámica, llena de ejemplos prácticos, de cuestionamientos sobre las diferentes estrategias para resolver los problemas surgidos con los temas vistos en la clase, por lo tanto, te invito a cuestionarte: ¿eres buen profesor?, ¿cómo fuiste de estudiante?, ¿estás motivado por tu práctica docente?, ¿eres un dictador o colaborador?.

 

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