Carabineros homosexuales.

Leo los diarios chilenos del día miércoles, 11.10.07 y me dan escalofríos.

Dos carabineros de Chile fueron forzados a renunciar por ser homosexuales. Pienso que seguimos pegados en la Génesis que dice que Dios creó al ser humano «Macho y hembra». Toda la discriminación hacia los homosexuales se basa en viejos escritos alegóricos de una época ya lejana. Hace rato que pasamos al siglo XXI y se continua con la persecución. Los valores impuestos hacen de las suyas en todas las sociedades enmascaradas de moralismo. Francamente algunos intelectuales chilenos han llegado a decirme que yo soy un gay del momento que escribo en favor de ellos. Seudos Intelectuales que habrán leído dos párrafos de Freud y te consideran ya un gay. Recuerdo las conversaciones con un viejo amigo mío, Rolando Alarcón, el conocido folclorista chileno y homosexual. Me decía que su homosexualidad no hunde la sociedad chilena sino que la ayuda a tenerla a flote. Sus conciertos llenaban las salas. Nunca se le negó el escenario y mucho menos los aplausos de los amantes del folclore. Es hora de sacarse la máscara y dejar a los seres humanos que elijan su propia sexualidad. Un Estado debe velar por el derecho al trabajo de cada ciudadano no importando su sexo o religión. Entre inmensas contradicciones de la sociedad chilena la constitución de la República de Chile hace agua y en el Capítulo III: De los Derechos y Deberes Constitucionales dice:

Art. 19. La Constitución asegura a todas las personas:
1. El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona.
2. La igualdad ante la ley. (…) Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias;
3. La igual protección de la ley en el ejercicio de sus derechos.
4. El respeto y protección a la vida privada y pública y a la honra de la persona y de su familia.

En fin, de nuevo se pisotean los derechos humanos de dos trabajadores en Chile y los superiores de los carabineros expulsados parecieran tener carta blanca para decir quien, o quienes, están protegidos por el articulo 19 de la constitución chilena.

Juan Godoy / Basel / Suiza